lunes, 26 de septiembre de 2016

Hollande promete cerrar el campo de Calais este año


Calais, Francia, 26 de septiembre, 2016 (AP). El campo migrante en Calais debe estar desmantelado por completo para final de año, afirmó el lunes el presidente de Francia François Hollande, en un intento de promocionar los esfuerzos del gobierno para abordar el problema antes de las elecciones presidenciales del año que viene.

Durante su primera visita a Calais desde que asumió la presidencia en 2012, Hollande dijo que el campo conocido como La Jungla es una "emergencia humanitaria".

Unas 7.000 personas viven en condiciones miserables cerca del puerto de Calais con la esperanza de llegar a Gran Bretaña desde allí, según las autoridades. Sin embargo, grupos humanitarios señalan que la cifra está más cerca de las 10.000 personas.

Hollande, que estudia presentarse a la reelección, enfrenta duras críticas de sus rivales conservadores y de ultraderecha, que ven el campo como un símbolo de su fracaso a la hora de gestionar la crisis migratoria en Europa.

El expresidente Nicolas Sarkozy, que compite por la candidatura en las primarias conservadoras, prometió la semana pasada en Calais que podría resolver el problema en pocos meses reinstaurando estrictos controles de fronteras en todo el país.

Francia forma parte de la zona europea en la que se permite la circulación de personas sin necesidad de pasaportes. Gran Bretaña, sin embargo, participa en ese proyecto.

En un discurso ante agentes de policía que vigilan la zona, Hollande prometió cerrar el campo "con método y determinación" para que no aparezcan nuevos asentamientos cerca de Calais o en otros puntos del país.

"Debemos garantizar un cierre duradero y eficaz de la frontera entre Francia y Gran Bretaña", dijo, insistiendo en que las autoridades británicas también deben hacer "su parte".

El gobierno anunció en verano sus planes para dispersar a los migrantes que viven en Calais en varios centros de todo el país, donde podrán solicitar asilo.

Hollande reafirmó ese plan el sábado durante una visita a uno de los 164 centros de recepción migratoria en la ciudad central de Tours.

El gobierno no ha dado un plazo límite fijo para completar la operación.

Los centros de recepción acogen entre 40 y 50 personas durante un máximo de cuatro meses mientras las autoridades estudian sus casos. Los migrantes que no pidan asilo serán deportados.

En una carta a Hollande, un grupo de ocho organizaciones sin fines de lucro que ayudan a migrantes pidieron una política a largo plazo de hospitalidad e integración en Francia. Las organizaciones criticaron el desmantelamiento del campo de Calais como "una visión a corto plazo que no resuelve nada para las docenas de personas que seguirán llegando cada día a Calais".

"En Calais y otros lugares, Francia no respeta los derechos humanos", afirmaron.